Áreas temáticas

Biodiversidad y manejo de ecosistemas

La comprensión de las funciones y servicios de los ecosistemas tiene la mayor importancia en la definición de acciones para el desarrollo sostenible. Su resistencia y resiliencia, sus límites y su complejidad distan mucho de haber sido comprendidos a cabalidad, en particular en las áreas tropicales. El valor de la diversidad de organismos biológicos en los ecosistemas es difícil de definir y establecer.

Aun así, las contribuciones de la biodiversidad a la salud de los ecosistemas se ven determinadas con frecuencia por su valor aparente inmediato para las actividades humanas. Este tipo de sistema de valoración no permite establecer de manera adecuada o consistente sus roles y valores. Para llegar a entender y preservarlos de manera más completa, las ciencias humanas y las que se ocupan de los recursos naturales deben trabajar conjuntamente en la investigación y en la educación relativas a la biodiversidad.

Algunas líneas de acción potencial en esta área incluyen:

  1. Estudios de las interacciones biofísicas y humanas en ecosistemas tropicales
  2. Valoración de biodiversidad y ecosistemas
  3. Restauración y remediación ecológica
  4. Uso sostenible de la biodiversidad tropical
  5. Manejo integrado de recursos terrestres y acuáticos
  6. Biología de la conservación y desarrollo sostenible.

Agricultura, desarrollo rural y seguridad alimentaria

Esta área temática se enfoca en ayudar a integrar las ciencias humanas y biofísicas en el estudio de los sistemas de producción animal, vegetal y forestal dentro de un ecosistema. Los sistemas de producción primarios deben garantizar que la población tenga acceso a alimentos en cantidad y calidad necesaria, al tiempo que conservan los recursos que los sostienen: agua, suelo, energía, biodiversidad… Se trata de un tema fundamental que no se puede desligar de la sostenibilidad del desarrollo de las regiones.

Agua y recursos hídricos

El CIDES apuesta por la integración de la dimensión ética en los usos múltiples del agua para manejar y mantener el recurso hídrico de forma sostenible en el largo plazo. El desarrollo de esquemas de manejo y sistemas tecnológicos que mejoren la eficiencia en el uso y limiten la contaminación necesariamente deberá incorporar la equidad social.

CIDES trabaja en las siguientes líneas bajo esta área temática:

  • Manejo integrado del recurso hídrico.
  • Calidad de aguas superficiales, subterráneas y marinas.
  • Garantía de calidad y cantidad de la fuente.
  • Identificación de causas de contaminación del agua y desarrollo de métodos para reducir o eliminar la contaminación proveniente de actividades antrópicas.
  • Programas de reutilización de aguas residuales para fines agrícolas, domésticos e industriales.
  • Vinculación de los recursos marino costeros.
  • Protección y monitoreo de las cuencas a nivel local comunitario.
    Valorización económica y ecológica del agua, y el pago de servicios ambientales para protección del recurso hídrico.

Energía

El factor condicionante de toda actividad humana es, directa o indirectamente, la disponibilidad de energía. Esta área temática se centra en ayudar a establecer las conexiones -a veces no tan obvias- entre fuentes, usos e impactos (como degradación de ecosistemas y cambio climático). Especialmente en materia de energías renovables:

  • Ampliación de la disponibilidad y el uso eficiente de fuentes de energía renovables
  • Desarrollo de programas de extensión y divulgación que enfaticen la importancia de la conservación de la energía
  • Identificación y estudios prospectivos de nuevas fuentes de energía ecológicamente amigable
  • Programas de formación para el desarrollo de investigaciones y transferencias de tecnologías limpias.

Salud, sociedad y ambiente

Si se entiende a la salud como una situación deseable de bienestar físico, mental y social, y que esto se obtiene –o no– dentro de los ecosistemas ocupados por cada grupo humano, es posible entender cómo la situación de salud de esos grupos expresa la calidad de sus relaciones con el ambiente del que dependen para existir. En efecto, las actividades encaminadas a la transformación del mundo natural desembocan en la creación de ambientes humanos de nuevo tipo. Así, cada sociedad tiene una salud característica, que resulta de las relaciones entre los grupos sociales que la integran, y entre éstos y el mundo natural. Estas relaciones pueden permanecer estables durante largos períodos de tiempo, o tornarse muy inestables durante períodos de crisis y cambio, cuando el deterioro de las relaciones económicas, sociales y políticas tiende a limitar la capacidad de los humanos para controlar sus propios ambientes, lo que puede conducir al surgimiento de nuevos y más complejos problemas de salud pública, de carácter tanto natural como societario. El estudio y comprensión de estos conflictos en el pasado, y de sus expresiones y tendencias en el presente, constituye una valiosa fuente de experiencias para la incorporación de variables de salud en la gestión del desarrollo sostenible.

Algunas líneas de acción en esta área son:

  • Relaciones entre sistemas urbanos/rurales y la salud integral del ser humano.
  • La evaluación, prevención y control de enfermedades emergentes y reemergentes.
  • Gestión ambiental y salud pública.
  • Equidad social y bienestar humano